miércoles, 5 de enero de 2011

Les traigo paz!

Estoy en esa etapa de la vida en la que lo único que digo es "No me hinchen los huevos". Para empezar, no tengo huevos.
Pero más allá de eso, de mil amores lo digo: no tengo ganas de que me hinchen los huevos con pelotudeces. Ni mi familia, ni mis amigos, ni mis amigas, ni nadie.
Me nacen unas inexplicables ganas de mandarlos a cagar, uno por uno. Y todos sabemos, lo que me cuesta aguantarmelas.
Entonces, haya paz. Nadie sale ganando si me rompen las bolas gratuitamente.
Los pases de facturas, los celitos, no por dios, no!.
No ahora.
Capaz en un tiempo, me lleno de paciencia y todo bien.
Hoy por hoy...NO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario