Soy una persona a la que casi todo la altera, pero creo que en el top ten está lo que voy a contar ahora.
Básicamente creo que la vida de las personas se define en el momento en el que la madre se entera si va a ser nena o varón. El tener o no un pito, marca la diferencia para el resto de la vida.
Ser nena implica que mamá, las tías y las primas, quieran peinarte desde el minuto uno... así es, tan temprano empieza el sufrimiento. Vinchas, hebillas, y los llamados "agarra peluza" (lo peor de todo es que hay alguien que los inventa).
Esta etapa de los hombres es más fácil (si, ya empieza a ser injusto, que le vamos a hacer) porque la única meta de los padres para con sus hijos varones, ¿cuál es? que juegue al fútbol. Entonces, le compran la primer pelotita y ahí se termina el "sufrimiento".
Ellos sueñan más básicamente que nosotras, quieren tener 5 varones para armarse el equipito y jugar a la pelota. Nada más.
Después viene la etapa en la que los varones tienen algo así como una crisis de sexualidad (por así decirlo) y juegan con los cochecitos para bebés de las nenas.
Es una etapa, pasa. Pero obvio que nos duele, y duele más porque el consuelo que te da tu mamá es un autito de ese nene que te robo el cochecito de tu bebé, para que juegues hasta que al señor se le ocurra devolverte lo que es tuyo. Acá empieza todo, acá es donde comenzamos a ceder.
Después viene una etapa en la que los varones y las nenas somos amigos, porque aprendemos a jugar juntos, a la mancha, a las escondidas, y digamos que es como si todos fuéramos varones.
Seguida de ésta, aparece la etapa del asco, nos odiamos mutuamente. No nos gusta ningún nene y a ellos ninguna nena. Pura repulsión.
Y acá si señores, empieza lo peor. Las nenas, empezamos a convertirnos en mujeres y esta edad es terrible.
Nos empiezan a crecer las tetas, pero no es así de simple como suena. No te crecen lo suficiente como para que te sientas orgullosa de usar corpiño, ni se quedan en su tamaño como para no usarlo. Es un tamaño molesto, los famosos "botoncitos". Tu mamá te casi obliga a usar corpiño y no hay nada mas vergonzoso que ese momento en la vida de una mujer. Tus amiguitos varones no acompañan para nada tu tristeza, sino que la hacen aún peor comentando y riéndose de que usas corpiño, e ir al colegio cada día se convierte en algo espantoso. Te empiezan a crecer más los pelos en las piernas, y la edad es complicada. Chica para depilarte, grande para parecer un monito. Si no te depilas, tus compañeros te cargan y si te depilas, también. Así de fácil nos hacen el camino los muy vivos. De a una nos empezamos a convertir en "señoritas" y ellos llevan el conteo de quien es y quien no (aunque sólo saben que "nos viene" pero no tienen IDEA de que es lo que nos viene). Mi tortura personal, aclaro. Para ellos es una edad sin demasiado cambio, ya que como siempre ¡Crecen más lento y maduran más tarde!.
Y finalmente, obtenemos un poquito de revancha. Un poquito, no dura mucho, pero sabemos saborearla. Nos ponemos buenas, ¿y qué queremos? ¡CHICOS MÁS GRANDES! Salimos en busca de quienes serán nuestros primeros novios y ellos... siguen jugando a la play mientras tanto.
Repasemos: Nos hacen ver ridículas cuando nos peinan, ellos nos sacan las cosas y nos la tenemos que bancar, empezamos a usar corpiño y a indisponernos (ese largo camino que transitamos la mayor parte de nuestra vida) y ellos, bueno ellos siguen jugando.
Ya más adelante, cuando la menstruación se vuelve algo de público conocimiento, tienen una frase que les encanta. Ante cualquier comentario con mala onda que hagas, te contestan : ¿Qué pasa? ¿Te vino?.
Me encantaría creer que esa frase en algún momento pasa de moda, pero no mis chiquitas. JAMÁS.
Viene un momento mágico, así es como te lo pinta tu mamá a la hora de esa charla. Y seamos sinceras, de mágico no tiene nada. De onda y con amor, pero a la que la haya pasado bien en ese momento, me saco el sombrero y la aplaudo. Nos duele hasta el alma, y a ellos nada. Si bien no debe ser muy excitante una cara de dolor, no la pasan mal como nosotras.
Y acá una verdaderamente se da cuenta que RECIÉN empieza esto.
Empiezan los "accidentes", las falsas alarmas, los atrasos que sólo aparecen para carcomerte la cabeza una semana y poner a ambos a prueba. Y después de MUCHOS años, las mujeres aprendemos, que a algunos hombres (¡existen excepciones felices y mágicas!) es mejor ni hacérselos saber. ¿Por qué? Porque sencillamente no están preparados. Son hombres y no nacieron para sufrir. No saben manejar la ansiedad, pero nosotras si sabemos manejar los dolores y los nervios. Lejos de tranquilizarte... están ahí picandote la nuca a ver si te vino, si no te vino y POR QUÉ no te vino, y nosotras, sabemos que son simplemente, cosas que pasan.
Cerrando este cumulo de etapas, ésta la demostración máxima de los ovarios gigantes que tenemos. Parir. Mujeres que dicen que el parto es un dolor espantoso y horrible, pero que lo volverían a hacer mil veces, por la felicidad que trae consigo el dolor.
Si los hombres tuvieran que parir chicas... seríamos todos hijos únicos.
Así de simple. No dejo de indignarme al escuchar padres que no quieren presenciar partos o cesáreas por impresión o miedo, mientras que nosotras tendremos que estar ahí firmemente dando a luz a su equipito de fútbol 5...
Y ahí es cuando verdaderamente ME ALTERO... al escucharlos decir que son "el sexo fuerte" y nosotras somos "el sexo débil". Poder levantar una heladera, no te hace fuerte.
Después de todo lo que acabo de contar, realmente... ¿Cómo les da la cara para llamarnos así? ¿Qué es ser fuerte para ustedes?.
Aún así, lo más maravilloso de nosotras, es que realmente y a pesar de todo lo malo, AMAMOS ser mujeres.
Vivan algo de ésto, y después me cuentan quien es el que tiene los huevos acá.
Ay, si existiese en serio...
Mi familia se la pasa agrandandose, ya nadie se sorprende cuando digo que voy a ser tía nuevamente.
Pero la realidad es que la ansiedad, la emoción y la alegría es siempre la misma. Si, con 6 sobrinos a cuestas, la noticia es igual de emocionante y hermosa.
A ésta séptima alegría, se le suma el saber que hay hermanitos y primos esperando también. Que opinen sobre a quien se va a parecer, sobre el sexo (antes que se supiera), los nombres...
¡Todo es hermoso!
Después de una racha de nenas, y otra de nenes... ¡volvieron las nenas!
Presento en sociedad a ¡Mía Candela Espina!
No sé como explicarlo. No estoy feliz, tampoco devastada.
Estoy un poco triste, pero no por el hecho en si. Sino por las conclusiones que saco de todo ésto.
Me encantaría poder mantenerme completamente al margen y no sentirme ni la mitad de lo desilusionada que me siento.
No sé si me duele más la falta de huevos, o el orgullo. Tampoco sé bien que es, pero si sé que de las dos es capaz. Y me enoja, no lo puedo evitar. Trato de pensar que ésto no tiene nada que ver conmigo y que no me puedo enojar por algo que me excede.
¡Pero es que no me excede! Me da bronca, me desilusiona, me entristece y hasta un poco de vergüenza me da. Le pongo mala cara, le contesto mal, casi que ni le hablo, pero ¿por qué? porque siento esa falta de huevos tan parte de mi historia, que si me siento tocada, si me enoja y si me duele. Y si así no fuera, si fuese solo orgullo, también me dolería. Quizás mas, quizás menos. Me parece que hay una edad para cada cosa, y que a esa edad, hay cosas que deberían haber quedado atrás.
Aparte de todo ésto, lo que siento es FIACA. Me da fiaca saber todo lo que viene.
Pensar en ese último almuerzo, cena, merienda... en el momento en el que prepare su bolso, y en el momento en el que se vaya. También todo el post, el primer almuerzo, merienda, cena, SIN.
Me da MUCHISIMA fiaca. No quiero. No quiero ir más a mi casa hasta que ésto no se termine.
Quiero volver y que ya esté todo hecho. No quiero ver un bolso, no quiero un abrazo de "despedida". No quiero nada de todo eso.
Ultimamente tengo que ver tantas boludeces, que a esta altura me parecen tan minúsculas y a mi entender, carecen de importancia que me sacan las ganas de andar contando todo ésto que me pasa.
Lo único que quiero es que este momento pase.
Quiero cerrar los ojos, abrirlos y que todo haya cambiado.
He saved me. In every way that a person can be saved.
si para recobrar lo recobrado
debi perder primero lo perdido
si para conseguir lo conseguido
tuve que soportar lo soportado
si para estar ahora enamorado
fue menester haber estado herido
tengo por bien sufrido lo sufrido
tengo por bien llorado lo llorado
porque despues de todo he comprobado
que no se goza bien de lo gozado
sino despues de haberlo padecido
No hay más vuelta de hoja.
Hay algo que quiero que quede claro. Amo escribir acá, pero no se dan una idea LA PAJA que me da.
Es más, mismo estar escribiendo sobre la paja que me da, me da mucha paja.
No se dan una idea la cantidad de entradas guardadas en borrador que tengo. Hay dias que arranco re compenetrada y llegando al final me da paja, el tener que cerrar el concepto. Y ahi queda...
Y hay dias en los que me da paja mover los dedos sobre el teclado, es así.
Hoy es uno de ellos :)
Es lunes, que queres?!
Soy un poquito mal hablada, si. Pero ¡Dale! al menos tengo ubicación y no hablo mal con o adelante de cualquiera. En el trabajo soy una lady, en casas ajenas ni te digo.
Y además... ¡no vamos a andar negando que soy una dulzura!

Fue allá por el 2005 que en medio de un torneo de hockey recibí un mensaje que decía: ¡Vas a ser madrina!. En ese momento lo supe.
Supe que iba a haber una personita que me iba a enloquecer, jamás me imaginé que de ésta manera.
Verlo nacer, verlo crecer, ver cada día como aprende algo nuevo y es un poquito más grande. Ver que ya no es el bebote que no cuestiona nada, que ya pregunta, duda, se queja... Ver que mi bolsa de cachetes se peina con gel y juega a la Playstation.
Es increíble y hermoso, ver como una personita se va transformando en persona.
Desde el día uno tuvimos algo especial, es como si hubiese sabido que yo iba a ser su madrina. Sos mío y yo soy tuya, en eso ya quedamos. La madrina es de Nico, y Nico es de la madrina. Lo reto si se porta mal, si. Porque que sea una de mis debilidades, no significa que una pulguita va a venir a manipularme a mi, ¡justo a mi!. Pero al medio segundo de retarlo, lo estoy abrazando, pidiéndole que por favor se porte bien, casi como si me estuviera haciendo un favor.
Desde el día que nació, fue mi verdadero primer amor. Lo es y lo va a ser siempre.
¡Feliz cumpleaños bombón de la madrina!
Necesito que seas feliz! :)
Soy la misma de ayer, aunque ya no respondo como antes...
Hace mucho que no escribo, pero es sólo porque escribir acá me pone nostálgica, inevitablemente leo las ultimas 10 entradas y siento todo a flor de piel otra vez.
Estos días, tuve muchos flashbacks. Me vi a mi, hace unos meses, llorando todos los días, sintiéndome mal. Recordé ese nudo en la garganta que sentía sin saber por qué. Me vi sin medio proyecto para llevar adelante, corriendo de un lado para el otro, sin disfrutar nada de todo lo que me pasaba.
Y si, puedo decir que por primera vez en mucho tiempo, me sentí orgullosa de mi misma.
Porque dsp de recordar eso me vi hoy, sin ganas de vomitar hace meses, riéndome, llena de planes y cosas que quiero concretar, con un futuro, sueños y metas. Sin correr más, dedicándome finalmente ese bendito tiempo a mi, a sentirme bien, sentirme linda, o descansar. Tiempo que a veces se vuelve complicado, porque una se pinta las uñas pero la cabeza sigue pensando... pero tiempo que necesitaba.
Me veo siendo mi completa antítesis de todo lo que vine siendo este ultimo tiempo, y ¡me encanta!.
Sin rencores, y sin culpas.
Parece que finalmente lo entendí, hay que ser feliz cueste lo que cueste.
Veinte años detesté mi nombre. Ni Carolina ni Caro, por el amor de dios.
Hasta hace unos días que se me dio por buscar el significado.
Bastó leerlo para que me empezara a gustar, para que todo mi nombre tuviese otro color.
Significa "mujer fuerte", y hoy creo que me sienta bien. Quizás por eso me pusieron ese nombre, por todo lo que iba a pasar, lo que iba a venir.
Soy fuerte, si. Las cosas no me afectan como a cualquier persona, soy más de mirar para adelante que para atrás. De pensar en positivo (por más que odie el optimismo) y entender que no puedo quedarme una vida tirada llorando por nada ni nadie. Que nadie se murió ni de amor, ni de odio.
Tengo en claro, que todo en la vida es cuestión de actitud. Es fácil sentarse a esperar sentirse mejor, pero es diez veces más valioso buscarlo. Hacer y deshacer lo que haga falta.
Sé que no soy una mina fácil de llevar, pero no es por cabrona. Es sencillamente porque soy incapaz de traicionarme a mi misma, puedo perder todo, pero jamás voy a callarme por miedo. Eso creo que es lo que mi papá más odia y a la vez ama de mi.
Es contradictorio, porque también soy bastante sensible. Pero creo que soy sensible en la cotidianeidad, me emociono, me aflijo, como cualquier persona. Soy sensible, si.
Mis papás tuvieron mil separaciones, y siempre recuerdo que en una mi papá me prohibió llorar y me dijo que yo tenía que estar bien, para que mi mamá este bien.
Esa es la clave, creo. Soy fuerte, se llevar muchas situaciones difíciles, pero eso no quita que las cosas me afecten o duelan, como al resto.
No importa que durante un año y medio te haya querido matar.
No importa que me cueste tanto entenderte a veces.
No importa que no me entre en la cabeza como tenes tanto caracter para algunas cosas, y tan poco para otras.
No importa que me den ganas de pegarte cuando veo que volves a caer una y otra vez.
No importa que todo ser vivo que te rodee me de celos.
No importa porque siempre vas a ser una de las personas que mas amo en el mundo.
Amo haberte conocido como y cuando te conocí, porque aprendí a valorarte.
Quizás si la historia hubiese sido diferente, tendríamos otra relación.
Cada vez que le cuento a alguien todo lo que vivimos todos, se me quedan mirando como diciendo "pobre piba". ¿Pobre piba? Mirá el hermano que tengo.
Fuiste el único que me abrió las puertas de su corazón, sin importar nada. Y no es sorpresa si digo que sos mi debilidad. Dejándome ser parte de tu vida, borraste todo lo feo que pasé, y pasaste, que todos pasamos, y eso es algo que SOLO VOS hiciste por mi.
¡Te adoro!♥
Te llevo literalmente en la piel, hoy y siempre.
No me parece que la gente mayor pueda decir pelotudeces, solo por ser mayor.
O sea, la mejor.
Pero aunque tengas mil años, si me pelotudeas o decis una imbecilidad, que no te quepa media duda, que te lo voy a decir.
Por dios, saquemosle el poder de ser viejos, a los viejos.

te extraño chiquito!
Dos cosas que aprendi esta ultima semana :
- Hay cosas que hay que evitar decir para no quedar como una desquiciada, aunque una realmente no crea estarlo. La unica chance que hay de sacarse ese nudito, es disfrutando el dulce sabor de la "empatia". Ja! Ponete en mi lugar ahora.
- No deberia estar sin pintarme las uñas hace una semana por querer ver a todo el mundo.
Tendria que probar el tema de dedicarme un tiempo a mi. Ese tiempo en el cual el mundo entero se puede curtir mientras me limo las uñas.
(Escribo sin tildes porque escribo desde el celu. Si, te cague. No soy analfabeta!)
Ultimamente recibo mas "el otro dia estuve leyendo tu blog" de los que realmente esperaba. Crei que no entraba nadie mas que amigas y yo, ponele. Revise todo lo que escribi desde que existe esto, y me mori de risa. Soy asi, impulsiva, y aca descargo mi ira. De muchas cosas probablemente me arrepiento al otro dia, pero de muchas otras puedo asegurar que no. Estoy un poco sugestionada ahora, no quiero poner nada para que nadie se sienta "tocado" con lo que escribo. Pero igualmente, como escuche hace poquito: "al que le quede el poncho que se lo ponga".
Hoy estoy como desilusionada, como "triste" y a la vez en una postura de que todo me chupa un huevo. Se que no soy culpable de lo que siento, aunque tampoco lo voy a explicar bien aca, tengo mis motivos y ejemplos para cada cosa que se me pasa por la cabeza. Es asi, el que se quema con leche, ve una vaca y llora.
Mas alla de esto, y por otro lado... Para mi el concepto de amistad abarca el "te digo todo lo que me pasa, lo que hago bien y lo que hago mal para que me aplaudas o me retes". Asi doy amistad, y asi la espero. El hecho de que me "eviten" vaya uno a saber por que, definitivamente no esta en mi lista de cosas que amo, y me da a pensar muchas cosas.
Lo unico que veo es eso, que me evitan. Ni que fuera un ogro, o tuviera la verdad absoluta. Solo doy mi opinion.
La vida te cruza inesperadamente con gente.
Estuve dos años y medio de mi vida con una persona, y eso hizo que conociera a una familia entera.
Ya no estoy con esa persona (no puedo decir "me pelée" porque no considero haberme peleado) y me duele y me molesta no poder ver al resto.
Nosotros tuvimos una historia, si. Cosas lindas y no tan lindas. Somos responsables y autores de todo lo que pasó. Pero el resto no.
Y me duele quedarme sin esas sonrisitas, sin los "yo quiero al lado de tia caro", sin los abrazos, los besos y hasta los juegos. Me duele no tener a su mamá, retandome y cuidandome, como si fuera la mía. Me duele no tener a su papá haciendome algún mal chiste, y no tener a sus hermanas para aliarme.
Me duele no poder ver a gente a la que aprendí a querer mucho, por haber terminado una relación. Es lógico, super entendible. Nadie quiere que su ex se lleve con su familia.
Pero COMO me duele! y COMO los extraño!! :(
Si usted está teniendo una discusión y tiene ganas de hacer sentir un insecto al oponente, he aquí un par de tips:
- Oponente: "Pero yo pensé que no te iba a molestar" ... "Bueno no, vos evidentemente NO PENSAS".
- Oponente: "No me grites" ... "NO TE ESTOY GRITANDO (con grito, si) ya te vas a dar cuenta cuando te grite!!".
- Un simple: "Vos me estas jodiendo no?" funciona, casi infalible te diría.
- "La verdad, te desconozco" (de los más duros, todos odiamos que digan que nos "desconocen").
- "Pensa lo que quieras. Si pensas eso, la verdad que no me conoces" (mas bronca todavía, detestamos que pongan en duda que tanto conocemos al otro).
- Reirse. Uno puede alterar de maneras inimaginables al otro, con solo marcar una leve sonrisa. A continuación viene el "De que te reis? que es lo que te causa gracia a ver?"
Hay una delgada línea entre "solo te estoy provocando para que saltes" y... "si seguis hablando te voy a romper la cabeza".
El "jueguito" tarde o temprano, se te re va de las manos.
Y terminas discutiendo. Si lo pensas un toque, hasta es gracioso.
Creo que uno realmente se siente bien cuando logra reirse de si mismo.
Cuando paso por momentos feos, mi consuelo siempre es: "algún día me voy a estar riendo de todo esto, voy a mirar para atrás y todo va a parecer mínimo".
Así es, llegué a ese punto. Y me río. De nadie. Sólo de mi y mi ingenuidad. De lo archi mega ciega que fui. De no haber visto antes tantas cosas que hoy me resultan super visibles y básicas.
Es como agarrar el manual que dejé hace unos 4 añitos, abrirlo, leerlo y sentarme a esperar que pasen todas esas cosas.
Así de simple y básico.
Es fácil juzgar o asombrarse de la forma de pensar o actuar de los demás.
Soy de esas fieles defensoras de que uno de grande es, lo que vio de chico. ¿Qué quiero decir con ésto? Que cada historia de vida, influye en cada personalidad. Es decir, nuestras diferentes historias nos hacen ser diferentes personas, que piensan y ven distintas las cosas, y que logicamente chocan o se llevan bien.
Sé que hay familias tipo, en las que todo es amor y paz, y se bancan en la que sea. Hay familias que creen que los lazos sanguíneos son más fuertes que todo. Que podes pelearte y enojarte, pero al final de todo, tus papas son tus papas, tus abuelos tus abuelos y tus hermanos tus hermanos, y por eso los vas a seguir queriendo siempre.
Bueno, no. Pienso totalmente diferente.
Mi propia historia me enseñó que los lazos familiares no garantizan absolutamente nada, y que no por un poquito de material genético en común tengo que querer a alguien.
Muchas personas (a mi alrededor) dicen no poder elegir entre "mamá y papá". ¿Por qué? porque vivimos con ese eterno mensaje de que hay que querer a los dos por igual.
Difiero totalmente, eso de querer igual porque ocupen el mismo lugar, me parece una real idiotez. Las personas tenemos más o menos afinidad, con el resto. Hay gente que se preocupa más o menos por uno, y gente que indudablemente te quiere y lo demuestra mas o menos que otro. Y eso, hace que todas las relaciones sean diferentes. ¿Por qué tengo que querer igual a mamá y a papá? ¿por qué los dos "decidieron" tenerme? Si mamá siempre dio todo por mi y papá no.
Si mamá fue y puso los ovarios sobre la mesa para contarle a mis hermanas que iban a tener una hermanita, y papá me negó durante 6 años.
Si tuve que pagar yo, por los errores que cometió el. Si yo me fumé el desprecio que él se merecía... si nunca me cuidó. ¿Por qué los tengo que querer por igual?.
Soy la persona, que mi historia me hizo ser.
Quiero a la gente que en verdad me quiere, y no quiero a nadie que no me quiera, o me quiera cuando le pinta.
No hago nada que no me nazca hacer, por el simple hecho de ser "familia".
Hoy no me nace ir a ver a mis abuelos, porque me cansé de remar. Me cansé de ser la dolobu que está siempre atrás preocupándose, y ser la última para ellos. Me cansé y no me interesa si "no sé cuantos años les quedan" porque yo tampoco sé cuanto me queda, y no me interesa vivir mi vida así... haciendo cosas que no siento.
Lo mismo con mi papá.
Las diferencias se sienten cuando uno es chico y no puede hacer nada. No puede hacer nada... hasta que es grande y aprende que hay ciertas cosas que realmente no valen la pena.
Habrá gente que se horrorice de lo que escribo o lo que pienso, y aún así ME RESBALA.
En definitiva, soy quien soy, por lo que me hicieron vivir. Pero bien orgullosa de serlo!
Estaba escribiendo para contar que habia arrancado una era de optimismo en mi vida, pero que había sido fuertemente violentada por una serie de eventos desafortunados, cuando llegando al final, se me borró todo.
Y bueno, me rio para no llorar. Pero el optimismo me tiene UN TOQUE los ovarios al plato.
Como diría alguien que sabe de la vida: Me gusta la gente que se queja, me cae bien. Para mi, abajo el optimismo. ¡Viva la queja!.
Es así. Pierdo facilmente la calma.
Ya está. Vi una foto, un comentario y mi día arrancó como el orto.
De verdad, quiero que alguien controle mi ira. Me van a enfermar!
Hago una mención especial solamente de las "paradas", cosas típicas de pasajeros y choferes.
* Tocar incansablemente el timbre, cuando sabes perfectamente que el chofer ya lo escuchó. Sencillamente no te quiere abrir, porque lo agarró el semáforo pero en verdad la parada es cruzando. Te escuchó, pero no le interesa tu ansiedad por bajarte.
* "Soltá el timbre querido, que no es el botón del baño". Un clásico.
* (timbre... el colectivo no se detiene)"PARADAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!" "Cambió la parada señora... es a media cuadra" "Si claro claro, ahora de repente cambio".
* "Bajas?" "NO". ¿Por qué la persona que está parada EN LA PUERTA del colectivo jamás baja? ¿Por qué no se corre asi evitamos pensar "entonces correte pelotudo" cada vez que escuchamos ese "NO"?
* Y tampoco falta, ese que se acordó justo en la parada que tenía que bajar... y se los lleva puestos a todos, corriendo.
El error está en idealizar.
Las personas no son siempre iguales y está claro que el paso del tiempo cambia muchisimo las cosas.
Cuesta y duele (y COMO duele) ver la realidad que vivimos. Ver como esa persona idealizada, cambia. O quizás muestra realmente como es.
Te armas de paciencia y la remas y la remas, porque quizás algún día algo cambie.
Y no, nada cambia. Sólo uno mismo, que de a poquito va sintiendo los brazos cansados de remar.
Te cansas de remar, y te quedas sentadito en el bote, aún esperando que algo cambie.
Pero un día te despertas, y te das cuenta que nada va a cambiar, y si llegara a cambiar ¿a esta altura, modificaría algo? ¿Realmente vale la pena seguir esperando?. Decidis bajarte del bote.
Sabes que ahora la vas a tener que remar diez veces más, sabes que va a haber más tormenta que nunca, pero aún así preferís bajarte.
Porque no vale la pena remar solo, por algo que no es solamente de uno.
Realmente creo que hay cosas que se pierden y jamás pueden recuperarse.
No todo, logicamente. Pero estas "pequeñas cosas" suelen ser de las principales.
Creo que la confianza, es un pilar de cualquier relación; sea amorosa, amistosa o cualquier otro tipo.
No soy una persona para nada confiada, al contrario. No creo en confiar en alguien hasta que me demuestre lo contrario. Creo en no confiar en nadie, hasta que me demuestre que lo merece. No desconfiar, sencillamente no confiar.
Para mi la confianza de una persona es algo que uno mismo se gana, con determinados actos o en determinados momentos.
Es algo muy dificil de lograr y muy fácil de perder. Puedo llevarme bien con mucha gente, tener mil amigos y todo eso, pero son contadas con los dedos de una sola mano esas personas en las que confío plenamente.
Aún con este pensamiento de no confiar en casi nadie, tengo una pila de desilusiones en mis cortos 20 años, pero todo sirve y todo suma para cambiar nuestra forma de ser.
Quizás hace un tiempo, me hubiese resultado más fácil volver a confiar en alguien.
Hoy no, simplemente no me interesa. Si alguien traicionó mi confianza una vez ¿por qué no dos?. Si, todos nos equivocamos. Pero realmente no estoy dispuesta a hacer borrón y cuenta nueva con quien no valoró mi confianza. Se equivocó una vez, puede equivocarse dos.
Creo muchísimo en que esas frases "armadas" son muy sabias, no por nada todo el mundo las sabe.
"Si me traicionas una vez, es tu culpa. Si me traicionas dos, es la mía."
Y así como recuerdo eso, recuerdo las tantas veces que mi papá después de alguna situación de este tipo me dijo "No confíes en nadie, solamente en vos".
No es para tanto, creo yo. Hay que confiar en alguien, sino te volves loco. Pero hay que abrir los ojos bien grandes y no regalar este tipo de cosas.
2 consejos para la vida:
* Nunca (jamás) juzgar a nadie. Porque quizás en algún momento uno se encuentre en la misma situación y tenga que tragarse todas sus palabras.
*Nunca (jamás) esperar de alguien lo que uno haría. Somos todos diferentes, y reaccionamos de formas distintas. Con esperar lo que uno haría, sólo se ganan desilusiones.
Para vos, ser humano que se enfrenta a la dura tarea de viajar en colectivo en hora pico, todos los días, he aquí las leyes:
* Siempre hay uno que quiere pasar a toda costa, y te codea, te empuja y te caga pisando. El pobre hombre (o mujer) no comprende que NO HAY ESPACIO, y sigue con el "permiiiiso, permiiiiiso". A ver amoroso, ¿qué queres? ¿que vuele? ¿que me tome la chiquitolina y al fin te deje pasar, ansioso de mierda? ¿a donde carajo vas con tanto apuro? ¿regalan golosinas al final del bondi?.
* El falso discapacitado. NUNCA falta. Esa vieja culona que solo quiere apoyar el orto en el asiento (habitualmente entre los 55-65 años) y se hace la pobre señora vieja y discapacitada. En algunos casos, ya directamente te pide el asiento y vos como un gil te paras pensando "esta vieja conchuda, está mejor que yo". Otra de las posibilidades es que se desocupe el asiento del cual vos vas agarrado y la vieja corra, vuele, y nade (ponele) en un micro segundo y cuando te quisiste ir a sentar, la señora en cuestión ya está sentada y dormida.
* Suele haber una clase de ratas inmundas que son los "me duermo en cada parada y si sube alguna embarazada o con un pibe, me hago bien el dolobu". De verdad no quiero ahondar en esto, porque me malhumoro de maneras inexplicables. Ahí estoy yo, peleándome con esa clase de pelotudos, cada vez que me subo a un colectivo.
* El desesperado por sacar el boleto, ay! que espécimen detestable. Si yo te juro y re juro que la máquina para sacar el boleto va a seguir estando ahí, no va a venir un extraterrestre y la va a secuestrar, ¿me harías el favor de dejar de pasarme la manito por adelante de la frente para sacar el bendito boleto, ponele? o de decir "¿me sacas?". No, vos me sacas a mi claramente. Estoy con la cartera agarrada como una garrapata para que no me afanen ni un centavo, colgada de donde puedo agarrarme y espalda con espalda con uno que me empuja, la verdad que no me brotan unas hermosas ganas de sacarte el bendito boleto de mierda!!!.
* El timbre de discapacitados. SIEMPRE hay un pelotudo que lo toca. Parece que la humanidad no comprende que es un timbre diferente, que hace un sonido totalmente irritante y constante hasta que el colectivo se detiene. Entonces, no lo tocan casi nunca los discapacitados y ¿lo venís a tocar vos?. Entiendo, te daba paja pararte y tocar el de la puerta. Dos segundos menos sentado, un garrón. Mucho mejor es ir cinco cuadras (por el centro, lo cual las hace como 10) con la chicharra esa sonando, GENIAL. Arranco el día con un humor imperdible!.
* La gente que no tiene control de sus pertenencias. Explicame ¿por qué me tengo que estar fumando tu bolsa en la cara todo el viaje?.
Realmente no logro entender a la gente.
O sea, explicame porque a tu sobrino en vez de llamarlo por el nombre o decirle "sobri" (ponele) le decis "tio".
No entendiste el concepto de los lazos familiares creo yo. ¿Qué necesidad hay de confundir tanto a una pobre criatura? El te dice "tio", vos le decis "carlitos" o "sobri" y ya. ¿Qué tanto problema?.
Si el argumento fuera que es para que aprenda a llamarte asi, es una idiotez todavia mas grande. Los chicos aprenden, tarde o temprano, y con repetirle unas cuantas veces "tiiii-oooo" "tiiii-ooo" va a alcanzar, para que cuando se le canten las pelotas te diga "tio". No es que por llamarlo asi, va a aprender más rápido.
No sé, me pone nerviosa.
Y lo de tío, y "carlitos" fue un ejemplo, aunque creo que estaba claro...
Estoy en esa etapa de la vida en la que lo único que digo es "No me hinchen los huevos". Para empezar, no tengo huevos.
Pero más allá de eso, de mil amores lo digo: no tengo ganas de que me hinchen los huevos con pelotudeces. Ni mi familia, ni mis amigos, ni mis amigas, ni nadie.
Me nacen unas inexplicables ganas de mandarlos a cagar, uno por uno. Y todos sabemos, lo que me cuesta aguantarmelas.
Entonces, haya paz. Nadie sale ganando si me rompen las bolas gratuitamente.
Los pases de facturas, los celitos, no por dios, no!.
No ahora.
Capaz en un tiempo, me lleno de paciencia y todo bien.
Hoy por hoy...NO.
No soy perfecta, Mi pelo no siempre esta peinado, Soy un poco peleadora, un poco molesta... Hay dias donde nada me sale bien... Pero cuando lo veo desde afuera, me doy cuenta de lo maravillosa que es la vida... y quizás..... quizás me gusta ser imperfecta.